INGREDIENTES para 4 personas o para 2 que coman mucho:
- 2 vasos de alubias pintas o rojas
- 2 zanahorias
- 1 puerro
- 1 cebolla grande
- Chorizo a gusto (yo he puesto cuatro trozos)
- Morcilla (1 morcilla)
- 1 hoja de laurel
- Aceite de oliva
- Sal
Para el toque final:
- Pimentón dulce (1 cucharada pequeña)
- Un poquito de pimentón picante (Media cucharada)
- 1 cucharada sopera de harina
- 1 diente de ajo
PREPARACIÓN:
Empezamos el día de anterior:
Lavamos las alubias en agua fría y las ponemos a remojo toda la noche. El caldo que vayan desprendiendo por la noche es con el que se van a cocinar al día siguiente.
Si se os ha olvidado poner las alubias a remojo, en internet hay un montón de consejos por si se os ha olvidado, como que las hirváis 20 minutos, dejéis enfriar el agua, y las volváis a hervir normalmente. Yo lo he probado, pero personalmente, si podéis ponerlas a remojo, quedan mucho más suaves. Además, el tiempo que hay que esperar para que hiervan y se vuelva a enfriar el agua no merece la pena... haced unos macarrones para ese día y poned las alubias a remojo para el siguiente.Es mi consejo.
Seguimos:
Pelamos y lavamos las zanahorias, el puerro y la cebolla. Partimos la cebolla y el puerro por la mitad, y lo echamos todo a la cazuela sin cortarlo en trocitos.
Echamos las alubias con el agua del remojo y añadimos más agua para que quede caldito.
Un chorrito de aceite, un puñadito de sal y la hoja de laurel.
Además, añadimos el chorizo (y sólo el chorizo) para que se cocine con el resto. Ponemos a fuego fuerte y cerramos la olla hasta que suba el pitorro. Luego lo bajamos a la mitad y dejamos que se cocine a fuego lento durante 30 minutos. (Si lo haces al puchero, por lo menos necesitas 4 horas para que se cocine, aunque luego si que es verdad que están más buenas).
Después de 30 minutos, abrir la olla, y sacar la cebolla, el puerro y la zanahoria, para batirlos aparte y hacer la salsita, junto con un poco del caldo de las alubias. Batir con la batidora hasta que quede una especie de puré y añadirlo a las alubias con el resto del caldo.
Cortar la morcilla en trozos y añadirla a la cazuela para que se haga simplemente con el calor del caldo.
Y el truco de la abuela:
En una sartén, cubrir el fondo con aceite de oliva y echar un diente de ajo a freír. Cuando esté frito, retirar y ponerlo en un mortero.
Al aceite que queda en la sartén y que está calentito, le echamos la cucharada de harina, disolvemos y echamos el pimentón. Retiramos del fuego para que no se queme.
Aparte, machamos el ajo en el mortero y añadimos un cazo del caldo de las alubias al mortero, para despegar el ajo. Y todo lo del mortero, lo ponemos en la sartén otra vez al fuego, para darle una vuelta.
Echamos todo lo de la sartén a la olla, y después de darle unas vueltas, cerramos para que se acabe de cocinar con el calor que le queda.
Mañana, cuando se las vaya a comer mi marido os pongo una foto, ahora no quiero abrir la olla para que no se enfríen. Buenas noches y feliz lunes a tod@s!!!
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