El origen de los lunes
Llevaba mucho tiempo con esta idea de crear un blog de cocina en la cabeza, aunque no me decidía a dar el paso. Sobre todo, me parecía buena idea porque voy haciendo miles de platos de recolecciones de otros blog de cocinas, y de recetas que voy inventando (no os penséis que os voy a descubrir ahora nada, simplemente, que a una receta le añado esto de aquí y lo otro de allá, porque creo que mezclando esos sabores va a estar todavía más rico) y claro...luego o no lo apunto, o lo apunto de aquella manera...y cuando quiero volver a repetir la receta...pues no me acuerdo.En un principio, pensé en crear un librito de cocina (versión oficial, el cuaderno gastado y lleno de aceite ya lo tengo), pero con el nuevo mundo de tecnologías, ¿por qué no un blog? Así, además de tener ordenaditas mis recetas, también las puedo compartir con el que quiera sin necesidad de copiarlas en un folio a sucio.
¿Y el nombre? A nadie le gustan los lunes...y alguien tenía que poner remedio a eso.
Para inaugurar el blog, y ya que no tengo fotos de las recetas que he hecho (aunque alguno se alegrará de que las repita para sacar fotos), voy a empezar con una receta que acabo de hacer y no quiero que se me olvide.
LASAÑA DE ESPINACAS. Para dos personas
INGREDIENTES:
- 6 placas de lasaña
- 400 gramos de espinacas (yo he utilizado congeladas)
- 1 cebolla roja (chalota)
- 3 cucharadas de harina
- 1/2 litro de leche
- Queso de rulo
- 6 tranchetes
- Un puñado de piñones
- Nuez moscada
- Aceite
- Sal
ELABORACIÓN:
Poner las placas de lasaña a hervir lo que marque en el paquete con el agua ya hirviendo, un poco de aceite y sal. 8-10 minutos. Yo lo que hago al sumergir las placas es: entre placa y placa cuento cinco segundos para que no se me peguen. No sé si funcionará o serán manías mías pero por si acaso...
Por otro lado, poner las espinacas en agua hirviendo con sal hasta que se descongelen por completo. Escurrir en un colador grande.
En una sartén, echar un poco de aceite de oliva y pochar la cebolla cortada pequeñita. Cuando esté pochada, se echa la harina, y se va añadiendo poco a poco la leche y sal a gusto.Yo también le echo un poco de nuez moscada porque me gusta el sabor que le da.
Cuando ya esté la bechamel hecha, echamos las espinacas escurridas y mezclamos.
Luego, en una fuente, ponemos una capa de lasaña (dos placas), y la mitad del relleno de las espinacas. Por encima, cortamos queso de rulo (de cabra) fino y ponemos unas 6 lonchitas. Espolvoreamos con piñones.
Por encima otra capa de lasaña, y la otra mitad de relleno. En esta, no he echado más queso de cabra para que no tape todo el sabor. Más piñones, y otra capa de lasaña. Por encima de la lasaña, cubrir con tranchetes. Antes de consumir, meter en el horno 15 minutos a 180 º para calentar y gratinar.
Como es para mañana, sólo os puedo enseñar cómo queda la lasaña preparada para el horno. Mañana antes de que se la coman, diré que le saquen una foto, a ver si la puedo colgar.
Que aproveche o como decimos por aquí, On egin!
Lo prometido es deuda, aquí está la lasaña gratinada... y de sabor puedo confirmar que muy rica.
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